Moldavia recrudece sus relaciones con Rusia
En un contexto de deterioro en las relaciones entre Rusia y Moldavia, veintidós diplomáticos rusos abandonaron el lunes la capital moldava, Chisinau, dejando mermado el personal de la embajada. Las autoridades moldavas han dicho que esta reducción de personal en la embajada rusa, que pasará de 70 a 25 miembros, establecerá la paridad con la embajada de Moldavia en Moscú, informó Reuters.
En Moldavia, antigua república soviética, también se siente cercana la invasión de Rusia en Ucrania: la presidenta moldava, la proeuropea Maia Sandu, ha acusado a Moscú de intentar desestabilizar su país. Medios moldavos han difundido imágenes en las que se observa a dos autobuses escoltados por la policía saliendo de la embajada rusa en dirección al aeropuerto.
Una fuente en el aeropuerto de Chisináu informó a Reuters de que el avión que transportaba al personal diplomático había partido con destino a la ciudad rusa de Sochi, desde donde continuaría su viaje hacia Moscú. Además de los 22 diplomáticos, también se ha solicitado a otros 23 miembros del personal de apoyo técnico y sus familias que abandonaran el país de la Europa del Este.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores de Moldavia, a partir del martes, solo podrán permanecer en Chisinau un máximo de 10 diplomáticos rusos y 15 miembros del personal de apoyo. La reducción de personal fue solicitada por el Ministerio de Exteriores moldavo en julio, debido a los supuestos intentos de Rusia de desestabilizar al pequeño estado, que comparte frontera con Rumania y Ucrania.
“En esta situación, coincidimos en la necesidad de limitar el número de diplomáticos acreditados de Rusia, de manera que se reduzca la cantidad de personas involucradas en intentos de desestabilización de la República de Moldavia”, comentó el ministro de Exteriores de Moldavia, Nicu Popescu. Desde la llegada al poder de Sandu en 2020, Chisinau se ha distanciado de Moscú. En febrero, Sandu acusó a Rusia de planear un golpe de Estado contra su Gobierno.