Previsiones de la economía rumana para el 2018
Empieza el año y empiezan las previsiones económicas para nuestro imprevisible mundo, y también para Rumanía, como no podía ser menos. Hace unos días leía a un analista que aseguraba disponer de la misma capacidad de predicción que cualquier ciudadano de este planeta, es decir, ninguna. Me pareció acertado, sobre todo si aceptamos que todo puede cambiar de un día a otro, cuenta José Miguel Viñals en su blog Rumanía Empresarial.
Pero todo y eso hay tendencias, así que veamos cuáles son las tendencias (previsiones) a las que apuntan los indicadores económicos rumanos para 2018 según la Comisión Nacional de Previsión (Comisia Nationala de Prognoza,http://www.cnp.ro/ro/prognoze) en su informe de otoño 2017 (toamna 2017)
La Región Oeste comprende las provincias de Timis, Arad, Hunedoara y Caras Severin. La provincia de Timis, sería la 3ª en PIB por cápita tras Bucarest y Cluj, estando muy cerca de esta última.
Aunque las cifras apuntan a un crecimiento muy potente que el Gobierno considera incluso pesimista (y en base al que justifica un aumento de los ingresos públicos bastante generoso), hace ya tiempo que se contesta un modelo basado en el consumo y la construcción residencial y no en un aumento de competitividad del país. Las importaciones continúan creciendo y ampliando el déficit comercial, los precios del inmobiliario crecen a niveles de 2008 (si bien los salarios se han doblado desde entonces, lo que reduce en mucho el esfuerzo de los compradores de una propiedad)…
El modelo se asemeja, con algunas diferencias, al crecimiento español de antes de la crisis del 2008. En esta línea el Banco Nacional de Rumanía anunció el lunes 8 de enero un aumento de los tipos base del RON al 2% (+0.25%), un pequeño esfuerzo de enfriar las cosas…
¿Dónde están las oportunidades de negocio en Rumanía
Actualmente el inmobiliario parece ser una buena zona, aunque ya se vislumbran riesgos. Trataré este tema en un artículo la próxima semana o la otra. Evidentemente todos los sectores que van de la mano de la construcción (ventanas, puertas, baldosas, instalaciones,…), pero atención a un posible sobrecalentamiento.
El sector del automóvil parece seguir una buena racha, sobre todo el de segunda mano y de importación: más de 1 millón de coches de segunda mano matriculados o rematriculados en 2017, lo que de hecho provoca un envejecimiento del parque automovilístico.
Consumo en general: siguen abriéndose áreas comerciales. El consumidor e deja llevar mucho por los productos que le aporten imagen y estatus. La venta online crece y crece. Turismo: tanto el flujo de turistas que visitan Rumanía como el de rumanos que viajan al extranjero sigue creciendo. Rumanía cuenta con gran potencial por ambos lados: como país dispone de magníficos polos de interés turístico, y su población está entre las menos viajeras de la UE, lo que está cambiando con el aumento del nivel de vida.
Por contra, la tan necesaria obra pública parece que NO será motor de crecimiento. Si 2017 ya marcó un mínimo, posiblemente 2018 lo haga también, sobre todo si en algún momento hay que recortar gastos por no cumplir con los ingresos esperados, que algunos analistas califican de irrealizables.
En fin, es normal que las políticas económicas cambien y se ajusten a las necesidades del entorno nacional e internacional, pero también lo debería ser mirar por el efecto a largo plazo. No cuidar los indicadores más importantes de la salud nacional no está bien. Las políticas de aumentos salariales son necesarias para evitar el éxodo poblacional, pero sólo aceptables si van acompañadas de aumento de la competitividad. No invertir en infraestructuras, educación, desarrollo de la sociedad civil y empresarial, atención médica,… equivale a estar todo el día comiendo chocolate.
Está muy bueno, pero al final da dolor de tripas. No conozco los entresijos tras las cifras presentadas y es evidente que cualquier gobierno merece un voto de confianza, pero lo que se muestra tiene tintes populistas y no beneficia a la industria nacional sino a la importación: el dinero se va fuera. La empresa privada deberá hacer un esfuerzo por aumentar también ella su competitividad y no seguir columpiándose como en tantos casos ha hecho hasta ahora culpando al Gobierno de todo. Y preparar salvavidas, pues puede venir marejada quizá más allá del 2018.
José Miguel Viñals
Director General de Diagonal Consulting SRL (Via Rumania)
Cónsul Honorario de España en Timisoara