La campaña presidencial se incendia con las acusaciones del presidente Basescu hacia el primer ministro Victor Ponta
El jefe de Estado rumano, Traian Basescu, lanzó anoche en una rueda de prensa una ofensiva contra los dos principales candidatos, el socialdemócrata y primer ministro Victor Ponta y el candidato de la coalición de centro derecha ACL, Klaus Iohannis.
Acusó a ambos de ser corruptos y de connivencia durante la campaña presidencial, al señalar que el alcalde de Sibiu apenas ha nombrado a su contrincante ni siquiera frente al Palatul Cotroceni, sede del Gobierno.
Horas más tarde, Basescu apareció en el canal de televisión Realitatea para revelar que Ponta fue un „oficial cubierto” del Servicio de Inteligencia Exterior (SIE) mientras ejercía como fiscal entre 1997 y 2001, por lo que habría cometido incompatibilidad.
Esta misma mañana, Ponta negó esas declaraciones al calificarlas de „mentirosas”, durante la peregrinación de Sfinta Parascheva en Iasi.
Por su parte, el conocido periodista Robert Turcescu, que recientemente desveló que había sido „oficial cubierto” del servicio secreto del Ministerio de Defensa, corroboró las afirmaciones de Basescu en su blog también esta misma mañana.
En los últimos años, los servicios secretos rumanos han estado en duda y han sufrido varios cambios de dirección, tras detectar algunos fallos.
Si se confirmara que Ponta ha pertenecido a uno de ellos, posiblemente no tendrá efectos electorales, según los expertos, pero sí institucionales y políticos que minarian la credibilidad de un país que está bajo vigilancia permanente de la Unión Europea por sus continuos avatares contra el Estado de Derecho.
Los comicios presidenciales se celebrarán el próximo 2 de noviembre. En caso de que se necesitara una segunda vuelta se organizará el 16 del mismo mes.