La Argentina de Leo Messi aburre en Bucarest, cuenta un periodista argentino de la agencia Reuters
La selección argentina de fútbol, con Lionel Messi en cancha, cumplió una pobre actuación y empató 0-0 ante Rumania en un amistoso disputado el miércoles en Bucarest, preparatorio para el Mundial que se inicia en junio. Argentina, que se presentó con todas sus figuras, no pudo quebrar a un modesto pero ordenado conjunto rumano que se quedó afuera de la Copa del Mundo.
Messi, que volvió a jugar en el equipo albiceleste tras más de cuatro meses, fue marcado muy cerca por los defensores rumanos, aunque se las ingenió para hilvanar sin mucho éxito algunas jugadas de ataque con Sergio Agüero, Gonzalo Higuaín y Angel Di María.
El comienzo del encuentro en el Estadio Nacional de Bucarest mostró al equipo sudamericano con muchas dudas en la zona defensiva -su talón de Aquiles- y el mediocampo, donde Fernando Gago no tuvo un buen desempeño y fue reemplazado en el complemento por Lucas Biglia.
Argentina padeció en la gestación de la jugada para los delanteros y no mostró su control de balón característico.
Argentina llegó tres veces con peligro al arco rumano en esa primera parte por intermedio de Messi, Agüero tras un slalom en el que dejó a cuatro rivales en el camino antes de rematar a las manos del arquero, y otro disparo de Higuaín.
Messi vomitó cuando se cumplían siete minutos pero se quedó en el campo de juego hasta el final de las acciones.
El arquero argentino Sergio Romero, muy cuestionado por sus flojas actuaciones y falta de continuidad en Francia, también tuvo que intervenir para salvar su arco al tapar un cabezazo de Ciprian Marika y un remate de Alexandru Maxim a los 20 y 32 minutos, respectivamente.
En el complemento Argentina trató de buscar variantes para quebrar el cerco rumano con los ingresos de Rodrigo Palacio y Biglia. Si bien consiguió mayor velocidad en el juego, los circuitos continuaron cortados y fue muy poco lo que pudo demostrar.
Sobre el final del encuentro Messi peleó una pelota ante tres rivales en el borde del área grande antes de habilitar a Palacio, cuyo defectuoso remate le quedó a Ezequiel Lavezzi. El remate del delantero, que había ingresado por Higuaín, fue despejado milagrosamente con las manos por el arquero rumano.
Argentina, que en Brasil compartirá el Grupo F junto con Bosnia, Irán y Nigeria, tiene programados los dos últimos partidos amistosos de local antes de su aventura mundialista.
El 4 de junio enfrentará a Trinidad y Tobago en el estadio Monumental de Buenos Aires y tres días después se medirá ante Eslovenia en la Ciudad de La Plata.