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​RIPENSIA REDIVIVUS!

Ripensia Simatoc mb l'escut del 1930, Foto: José Miguel Viñals
Ripensia Simatoc mb l'escut del 1930, Foto: José Miguel Viñals

Lo primero que sorprende del logo del F.C. Ripensia Timisoara es su enorme parecido con una senyera en que la alternancia amarillo rojo se hubiese invertido. La presencia del blanco lo acerca incluso al escudo de la Ciudad de Barcelona. http://ripensiatimisoara.ro/club/identitate/valori/

¿Casualidad?

El logo del Ripensia Timisoara vuelve a estar presente, de forma aún discreta pero creciente, en la ciudad donde nació, en 1928, y de la que desapareció en 1948 con la implantación de un régimen comunista que modificó el panorama deportivo nacional.

Timisoara fue durante siglos resultado de la convivencia de múltiples culturas y religiones. De hecho no sólo Timisoara, sino toda la región, el Banato, donde húngaros, alemanes, serbios, rumanos, ucranianos, checos, búlgaros, ortodoxos, judíos, católicos, … formaban sus comunidades permeables, con sus escuelas, diarios e iglesias, donde los matrimonios mixtos estaban a la orden del día y la convivencia fue norma en una zona rica y orgullosa de serlo. No por nada había sido Timisoara la primera ciudad electrificada de Europa y la segunda del mundo, tras Nueva York. Se decía que “un niño tonto del Banat habla tres idiomas”, pues los aprendían en su día a día en familia, escuela o jugando en la calle.

El F.C. Ripensia Timisoara era reflejo de esta multiculturalidad del Banato, se enorgullecía de ello y su equipo así lo representaba. Su primer entrenador, Ferenc Plattkó, fue anteriormente portero del FC Barcelona, equipo al que después volvió también como entrenador. Húngaro de origen y uno de los mejores porteros de su época – Rafael Alberti le dedicó la “Oda a Plattko”- llega al Ripensia en octubre de 1930 desde Barcelona y abandona el club en febrero de 1931. Muy poco tiempo, pero suficiente como para ser quien puso la primera piedra de la construcción sólida sobre la cual, en los años sucesivo, el “Ripi” dominaría el futbol rumano (Plattkó rămâne cel care a pus piatra de temelie a construcției solide din anii următori, când „Ripi” avea să domine fotbalul românesc http://www.druckeria.ro/legenda-la-barcelona-deschizator-de-drumuri-la-timisoara/). Aunque no esté claro, parece que fue en ese tiempo en que los colores del club pasaron de violeta y amarillo al rojo y amarillo, si bien estos colores no habían estado asociados ni a Timisoara ni al Banato.

No fue Plattkó el único contacto entre el Ripensia Timisoara y el FC Barcelona. De 1950 a 1952 Nicolae Simatoc, fue 6 y 10 del equipo catalán. Previamente estuvo de 1938 a 1941 en el „Ripi”, donde devutó a los 18 años. Su hijo Silvio Simatoc, residente en Barcelona, estuvo el 18 de junio en Timisoara acompañando la presentación de un libro sobre el jugador „Nicolae Simatoc (1920-1979) Legenda unui fotbalist basarabean. De la Ripensia la FC Barcelona” en una emotiva ceremonia donde conoció a un compañero de su padre, superviviente de 86 años. La temporada 51/52 se saldó con 4 copas : La Copa Latina, la Liga, La Copa del Rey y la Copa Eva Duarte así como el trofeo Martini-Rossi.

El F.C. Ripensia desapareció durante muchos años. Hasta ahora. En 2012 renació. Recuperó sus colores y creó un equipo. De la mano de su Presidente, Radu Ienovan, poco a poco va haciéndose presente, de nuevo en la escena deportiva de la ciudad, con el objetivo de „reconstruir el primer club de fútbol profesional de Rumania”. De nuevo, el FC Barcelona se cruza en el camino de este club inspirando las bases del equipo como claramente lo reconoce el equipo directivo. Su slogan „Un Club Autentic”, y su reglamento pretenden „representar con lealtad y orgullo al Banato, cuyas tradiciones, historia e identidad quiere promocionar y continuar, constituir un elemento de cohesión y de afirmación de la unión de los miembros del club al Banato „. Basta cambiar Banato por Catalunya. Si un admirador del Barça debiera tener un equipo favorito en Rumania, este debería ser, sin duda, el F.C. Ripensia Timisoara.

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