Crear una gran Timisoara

El futuro tiene 2 ejes: grandes estados y grandes ciudades. El resto no contará. En un momento en que en Rumanía aún se habla de regionalización (mucho menos que hace un par de años) y en España algunos piensan en dividirla, la realidad mundial sigue una senda opuesta. Repito, sólo las grandes ciudades y los grandes estados contarán en el futuro.

Los estados pequeños desaparecerán o pasarán a depender de los grandes en su totalidad. Tal como dijo ayer 10 de abril el Sr. Emilio Lamo de Espinosa, presidente del Real Instituto Elcano “Los únicos que creemos que Europa es una gran potencia somos los europeos. El mapa eurocéntrico se ha quedado viejo, en el nuevo mapa mundial Asia está en el centro y extremo occidente es España. Estamos pasando a la periferia“….”Europa, si no es capaz de crear una suerte de Estados Unidos de Europa, verá menguar a pasos agigantados su influencia“. Buen artículo en El Mundo sobre los bloques del futuro con una dosis de Realpolitik bastante necesaria en el día de hoy (http://www.elmundo.es/grafico/economia/2015/04/11/55283007268e3e120c8b4575.html) Las ciudades con ambición, posibilidades y buen gobierno desbordarán su influencia. Crecerán, atraerán población, acumularán riqueza y poder. Las regiones propias y próximas dependerán de éstas. Las decisiones de las ciudades repercutirán mucho más allá de sus propios límites teóricos. Ya sucede esto en gran parte del mundo desarrollado: Madrid capital pesa mucho más que la región, Cataluña depende de Barcelona. Será más importante ser alcalde de una gran ciudad que presidente de la región que la incluya. Ya comenté hace meses en una entrada en este blog estos puntos, y dije que entre Bucarest, Belgrado y Budapest (BBB) hay sitio para una una gran ciudad, sólo una, y que esta debía ser Timisoara. También comenté en otra entrada la importancia del eje Timisoara – Arad, al que llamé Timisoarad. Olvídense de regiones, provincias u otras divisiones administrativas. Apuesten por las ciudades. La gran suerte para Rumanía es que esta posible gran ciudad está en su territorio. Sería ridículo no aprovecharla.

El pasado 8 de abril oí campanas. Su música me recordó lo antes dicho. Fue durante la celebración, en el Ayuntamiento de la ciudad, de la primera Asamblea General (AG) del Consejo Consultivo Económico de Timisoara (CCET). bajo la presidencia del alcalde, Sr. Nicolae Robu, desarrollada y coordinada por el actual vice presidente del Consiliu Judetean, Sr. Marian-Constantin Vasile durante su etapa de consejero personal del alcalde. El CCET se establece los siguientes objetivos:

1. Definir unas visiones y estrategias complementarias a las del Ayuntamiento, proponer soluciones (a los problemas existentes) y proyectos.

2. Armonizar las perspectivas de la administración pública local, del sector privado y de las instituciones docentes.

3. Mejorar y acelerar la puesta en marcha de los proyectos de la administración pública.

4. Creación de partenariados públicos – privados

5. Estimulación del desarrollo de Timisoara tanto desde el punto de vista urbanístico como económico.

Es decir, crear la Gran Timisoara Las principales áreas de acción que se ha asignado son: negocios, relaciones externas, urbanismo, energía, transporte, ocio y turismo y educación. Se habló del eje Timisoara – Arad y se proyectó una imagen de Timisoara en el centro de esta zona de Europa y su gran área de influencia. Timisoara tiene una situación privilegiada.

Fui invitado al evento por dos vías, la de miembro del Cuerpo Consular como Cónsul Honorario de España y la de socio del Club de empresarios francófonos. La lista de invitados fue larga. Además de los 2 colectivos mencionados figuraban lo restantes clubs de empresarios extranjeros (alemán e italiano), la Cámara de Comercio, las distintas agencias oficiales de desarrollo local, clusters (energía, IT, automóvil. turismo, pubicidad, agricultura,…), universidades, banca, agencia tributaria, aeropuerto,….. en total unas 50 entidades que se considera que pueden tener algo que decir en el desarrollo de la ciudad y que se agrupan en la AG. Se crean 8 grupos de trabajo (GT) coordinados, cada uno de ellos, por un vicepresidente y las entidades que lo deseen, para analizar la situación actual y buscar soluciones a lo posibles problemas que se puedan detectar. Los GT se reunirán 2 veces por semana y los vicepresidentes explicarán la evolución de sus trabajos en la Oficina Permanente (OP), presidida por el Alcalde, en su reunión mensual. Trimestralmente se reunirá la AG con el fin de comentar los avances. El Alcalde se compromete a tomar las propuestas del CCET una vez validadas, hacerlas llegar al aparato ejecutivo del Ayuntamiento, obtener su punto de vista y poner en marcha las medidas que se consideren oportunas. Hasta aquí todo muy bien. Es decir, la intención de implicar a la sociedad civil en la evolución de la ciudad es una iniciativa muy buena. Habrá que ver que realmente las entidades participen, se generen iniciativas de interés y que sirva de algo. Si al final la implicación de varias decenas de personas, todas ellas muy ocupadas, no se tradujese en la aplicación por parte del Ayuntamiento de las propuestas que se puedan aprobar, todo esto no habrá servido de nada. Soy escéptico. No sé hasta qué punto las reuniones de lo GT servirán. Lo digo porque mi experiencia de largos años en comités y reuniones que se acaban diluyendo como azucarillos. Generalmente los responsables de cualquier acción tienen un excesivo afán de protagonismo. Cuando alguien pilla un micrófono no lo suelta ni que lo maten. En la reunión de la AG, excepto 3 personas (de 11 que hablaron), nadie respetó el tiempo acordado. De todo lo que se dijo, yo mismo recuerdo pocos extractos. Suerte que repartieron fotocopias con el PDF. Si esto pasa en una reunión de los GT, en que el vicepresidente o un miembro (por lo general el de mayor ímpetu vocal y expresivo) se dedican a monopolizar el grupo, al final quedarán ellos dos y el gato. Sería una pena. Los ocho grupos de trabajo están liderados por un responsable de:

1. Club de Empresarios: atracción de inversiones a través de sus relaciones exteriores, partenariados,

2. Agencia de desarrollo económico de Timis: proyectos provinciales, relaciones entre la diputación (CJ) y el ayuntamiento de Timisoara

3. Agencia de Desarrollo Regional: Papel de Timisoara en los proyectos regionales (la región incluye 4 provincias)

4. Cámara de Comercio: promoción empresarial, competitividad, comercio y servicios.

5. Departamento gubernamental para pequeñas y medianas empresas: principal objetivo, reducir la burocracia que paraliza el desarrollo empresarial.

6. Docencia: equilibrar el número de estudiantes universitarios y los de formación profesional

7. Facultad de transporte público: Desarrollo urbanístico de la ciudad

8. Bancario: Instrumentos de financiación para el medio público y privado.

Yo unificaría por un lado el 1 el 4 y el 5 y por otro el 2 y el 3 dejando en total 4 grupos, e implicaría a Arad en el proyecto, animándolos a que hicieran lo mismo y se unificasen las acciones a implementar. Ni Timisoara puede ignorar a Arad ni Arad a Timisoara. Quizá quede todo en buenas intenciones, quizá sirva para dar el empuje empresarial que Timisoara necesita. El alcalde Sr. Robu dijo que todo dependía de nosotros. Buen punto de partida en un país donde, como en España, siempre es más cómodo echarle las culpas de todo a otros, por lo general a la capital, que afrontar las propias miserias con un mea culpa. Si se consigue, este sería el primer paso necesario para hacer de Timisoarad la gran ciudad entre BBB, una potencia regional logística, emprendedora, business friendly, productiva, de mentalidad europea, modelo ecológico, con buen nivel de vida, un cierto dinamismo turístico, polo universitario y de atracción de talento, modelo de la nueva Rumanía que hay que hacer. Si no se consigue, otro lo hará, aquí paz y después gloria. Apuesto por lo primero. José Miguel Viñals Director General de Via Rumania – Diagonal Consulting SRL Cónsul Honorario de España en Timisoara.