Adopción selectiva en Rumanía
“Tres de cada cuatro familias que quieren adoptar rechazan de entrada a los niños gitanos”, lamenta el Romania libera, basándose en los datos publicados por la Oficina de Adopciones de Rumanía sobre el año 2012.
Los rumanos que “van más allá de los prejuicios”, como el docente que posa en portada con su hija con “una tez más oscura”, son más bien una excepción. “Los rumanos son racistas”, reconoce abiertamente un pastor protestante, que tiene dos hijos adoptados gitanos.
Estos prejuicios arraigados se deben a la “falta de educación”, explica en el diario la psicóloga de la Oficina de Adopciones, Cristina Neacsu:
„Las familias que quieren adoptar] llegan todas con ideas preconcebidas. Nosotros les explicamos que no hay un gen de la delincuencia o de la agresividad. Otros tienen miedo de que el niño en cuestión sufra discriminación”
En 2012, de las 1.222 familias que obtuvieron el permiso para adoptar, 875 estipularon por escrito que quieren conocer únicamente a “niños rumanos, cualquier otra etnia queda excluida”.
“Las estadísticas muestran que los rumanos prefieren esperar años a que el Estado encuentre un niño compatible, en lugar de adoptar a un menor gitano”, indica el Romania libera.