¿Cómo es el rumano?
Psicología del Pueblo Rumano Las conclusiones de una investigación que se hace una vez cada 100 años: Cómo somos, cómo creemos, qué somos y cómo queremos ser.
La característica esencial de los rumanos es la desconfianza hacia las personas. La preocupación por el bien de los demás no va más allá de la familia. Y todos los rumanos buscan el poder social, “pero de forma hipócrita, conforme a una cultura colectivista en la que no queda bien mostrar que quieres salirte de la fila, escondiendo este deseo con la máscara de la modestia y el sacrificio hacia los demás”. Las conclusiones pertenecen a uno de los más importantes estudios de los últimos cien años, la Psicología del Pueblo Rumano. El Perfil Psicológico de los Rumanos”- proyecto coordinado por el reputado psicólogo Daniel David.
Daniel David, director y fundador del Departamento de Psicología Clínica y Psicoterapia de la Universidad Babes-Bolyai (UBB) din Cluj-Napoca, es el coordinador del grupo de psicólogos que retoman el trabajo del filósofo Constantin Radulescu Motru –“Psicología del pueblo rumano”.
El trabajo del nuevo estudio, llamado “Psicología del Pueblo Rumano. Perfil Psicológico de los Rumanos”, que comenzó en 2013, se han empleado test psicológicos internacionales adaptados a la población rumana, el estudio integral será publicado en la primera mitad de este año, casi 100 años después de la aparición del perfil realizado por Constantin Radulescu Motru.
Hasta la aparición del estudio integral, Daniel David, profesor de ciencias cognitivas clínicas en la UBB, profesor universitario adjunto de la Mount Sinai School of Medicine New-york, USA, y formador en psicoterapia racional-emotiva y cognitiva-comportamental en el Albert Ellis Institute, USA, ha publicado en la Revista Sinteza y en su blog personal una serie de conclusiones de la investigación.
Daniel David nos adelanta las conclusiones:
- Cómo somos (el perfil psicológico superficial) y cómo hemos llegado a ser así.
El perfil psicológico superficial está parcialmente desarrollado en algunos segmentos, no expresando el potencial que tenemos. De forma que, el alto potencial para la inteligencia cognitiva/emocional, la creatividad y aprendizaje no está valorado. La estructura de personalidad, a menudo defensiva, soporta algunas veces muchos aspectos negativos (por ejemplo cinismo/escepticismo/ misantropía, etc.). Es un comportamiento que no se resigna ante las normas y reglas.
Por otra parte tenemos una gran necesidad de demostrar el valor (potencial), lo que nos hace competitivos en el trabajo; si las condiciones socio-culturales son favorables, la competitividad se traduce en rendimiento (ejemplo: se puede constatar el rendimiento de los rumanos en el extranjero en el medio académico). El trabajo (como modalidad de afirmación social), la familia (en el contexto de la seguridad) y su religiosidad (que da un sentido y significado a la vida) son los tres pilares que definen la vida de los rumanos. Estos límites son una característica cardinal de los rumanos, además, de la desconfianza en las personas; generalizada en los desconocidos los conocidos/amigos, exceptuando la familia donde, al contrario, esta compensada con una confianza mayor.
Este perfil psicológico superficial deriva de forma en que el medio socio-cultural interacciona con el perfil psicológico profundo. Bajo este aspecto psicológico -cultural los rumanos buscan el poder social, pero de forma hipócrita, conforme a una cultura de colectivista en la que no queda bien mostrar que quieres salirte de la fila, escondiendo este deseo con la máscara de la modestia y el sacrificio para los demás (ejemplo: no quiero el poder, pero la gente me lo pide…)
Después, la utilización del poder se hace desde un paradigma femenino, caracterizado, mediante el dialogo y buscando consenso. Pero por causa de que el cinismo social y el escepticismo son altos, a menudo estas discusiones hacia el consenso se atascan por discrepancias/malentendidos, no se llega a planes concretos y los líderes a menudo rehusan el respeto debido. (por ejemplo el carisma/los valores)
Una cultura colectivista está caracterizada por la desconfianza a los extraños, desconfianza que los rumanos amplifican desde un nivel bajo de autodeterminación de espíritu cívico, así como decía, se ha generalizado en una desconfianza crónica, incluso sobre personas conocidas.
La cultura de los rumanos promueve la hétero -determinación (influencia tradicional/religiosa), en detrimento de la autodeterminación (autonomía en las decisiones) y un pragmatismo (el interés personal), en detrimento del espíritu cívico.
Los rumanos tienen un estilo cultural represivo y evasivo, lo que los hace estar a la defensiva.
Ese estado de defensa se puede expresar mediante complejos de inferioridad y/o, si estos están compensado, por complejos de superioridad. En lo que concierne a los complejos de inferioridad, por ejemplo, los rumanos tienen aspiraciones similares a los países occidentales, pero a menudo tienen dudas de que las puedan realizar y se sienten obligados a hacer auto comparaciones y comparaciones con otros mejores para validarse.
Los rumanos tienen una puntuación menor en los valores universales (preocupación para el bien general, benevolencia (buena voluntad, preocupación por el bien de las personas conocidas), hedonismo (búsqueda del placer), estimulación (búsqueda de lo nuevo) y autodeterminación (autonomía/independencia), pero aparentemente, para dar una buena impresión, se pueden presentar acordando importancia a estos valores.
Es muy interesante que para los rumanos el universalismo es secundario, la preocupación por el bien de otros no va más allá de la propia familia y llega como muy lejos a las personas que conocen. Esto es un individualismo egoísta, que no es opuesto al colectivismo, sino que lo fundamente en una forma muy específica (familiarmente); lo contrario de colectivismos es un individualismo benevolente y universalista.
Los rumanos tienen un grado alto de rendimiento (han demostrado que son competentes), poder (obtener estatus social) y conformismo (a las normas existentes). Es interesante que, el grado de tradición y seguridad están hoy a un nivel medio (pero a veces son exagerados para dar una buena impresión). Probablemente la traición esta vista en el presente como una necesidad, estando preparados para renunciar a ella cuando no trae ya ningún beneficio o si aparece algo mejor.
Probablemente la seguridad ha sido un factor importante de influencia de las normas socio-culturales de los rumanos, estas normas derivadas de la necesidad de seguridad se perpetúan, en el presente la seguridad está asegurada. (por ejemplo la adhesión a la OTAN y a la UE).
La autonomía tiene un estatuto interesante para los rumanos. Cuando se evalúa como una opinión, los rumanos se consideran igual de autónomos que los americanos y los turcos; los chinos, los alemanes y los españoles se sienten más autónomos, pero los rusos y ucranianos menos. Cuando es evaluada como una actitud, la autonomía de los rumanos es más baja. Por lo tanto, tomando en cálculo la situación de los chinos, la opinión de los rumanos podría reflejar la forma en la que creen y/o desearían que fuese, más que la situación en la que están verdaderamente.
La relación de los rumanos con la religión es muy interesante. Así como he dicho mas arriba, el desprecio, la duda y el relativismo son mas bajos, pero el conformismo creciente, es lo que los hace predispuestos a aceptar dogmas (en este caso religiosos). Los rumanos tienen un nivel alto de devoción y ven la religión como algo muy importante en sus vidas (tienen confianza en la iglesia). Aunque creen mucho en el desarrollo científico, si este se midiese con la religión, el 50.2% de los rumanos elegiría la religión. La religión se ve como equilibrada: (1) no solo como norma/ceremonia religiosa, si no como medio de hacer el bien a las personas y (2) no solo como un sentido para la otra vida, sino como algo que da sentido (ayuda) para esta vida.
A largo plazo, transgeneracional, estos elementos del perfil psicológico superficial pueden asimilarse en el perfil psicológico profundo.
- Cómo podríamos ser (el perfil psicologico profundo)
El perfil psicológico profundo, el potencial que tenemos, esta al mismo nivel que el de otros países/culturas modernas y democráticas, de forma que, a través de este perfil, los rumanos son perfectamente integrables en el mundo moderno (UE, OTAN, etc.). Este perfil deriva de la interacción del medio sociocultural, ecológico y biológico/genético. De forma que, tenemos alto potencial (comprados con los franceses, británicos, americanos) para la inteligencia cognitiva/emocional, creatividad y aprendizaje. La estructura de personalidad permite tanto expresiones positivas, como negativas, dependiendo de nosotros mismos que las modelamos socio-culturalmente.
Es un infortunio extremamente grande que el medio-sociocultural de un país no permita expresar y poner en valor el potencial que tenemos en el perfil psicológico superficial; a menudo los rumanos deben marcharse a otros países para poder realizar el potencial que tienen. Esta oposición real entre el potencial bueno y la puesta en valor deficitaria, aparece también en la percepción de los rumanos basada en análisis de etno-psicología, como auto -estereotipo nacional
•Como creemos que somos y por que.
Este enfoque genera además los auto-estereotipos de los rumanos. Tenemos una buena impresión sobre nosotros, consideramos que somos personas “cálidas”. (acogedoras /hospitalarias/tolerantes/altruistas, etc.) e inteligentes (creativas/con habilidades sobre la media etc.) Honorables, que aparece como una auto- atribución a la importancia de los rumanos tanto en los análisis de 1988, como también en los de 1993, que empieza a disiparse en los análisis de 2005 y 2007 y no ocupa una posición importante en ningún de nuestros análisis 2014/2015.
La personalidad está considerada como positiva, con sentido de humor, compensando los comportamientos más negativos (como por ejemplo la indisciplina), que contextualizamos, definiéndolo como una característica situacional y no estable.
Nos vemos hoy como alternando entre (a) individualismo (mas egoísta) frente al colectivismo, (b) a la dejadez/autodisciplina escasa frente perseverancia (interés/obstinación) (c) autonomía frente a la dependencia grupal. Esta imagen dominante positiva es necesaria desde el punto de vista psicológico para formar nuestra autoestima.
Los elementos negativos de esta imagen aparecen solo para dar credibilidad a los aspectos positivos, siendo atenuante: (a) individualismo, presentado como egoísmo, se extiende para incluir a la familia y (b) la dejadez/ autodisciplina escasa puede superarse en cualquier momento, si “algo nos interesa”.
Resumiendo, nos consideramos hospitalarios, inteligentes, con sentido del humor, patriotas, adaptados/ bien orientados y amigables; reconocemos que en comparación con los atributos de más arriba, la honestidad, autodisciplina y educación son más bajos.
Una subcategoría de este punto 3 se refiere a como creen otros que somos. Este enfoque genera hétero -estereotipos frente a los rumanos. Hay pocos estudios rigurosos sobre este tipo en referencia a los rumanos. Intento aun así una síntesis de las conclusiones a las que he llegado. Otros nos ven como patriotas y adaptados/bien orientados, pero el resto de nuestros auto estereotipos de más arriba están minimizados. Recientemente, los rumanos se asocian a Drácula/vampiros, sobretodo en USA, y con comportamientos antisociales inconscientes, sobre todo en Europa occidental. Es interesante, lo de la inconsciencia de los estereotipos frente a los rumanos es reconocido también en los auto-estereotipos de los rumanos.
Otra subcategoría de este punto se refiere a como creemos que son otros. Y por consiguiente, como ven los rumanos a los demás.
1. Americanos- poderosos /con sentido del humor, patriotas;
2. Británicos- inteligentes/educados, honestos, patriotas;
3. Chinos- patriotas, honestos, trabajadores, inteligentes;
4. Franceses- patriotas, inteligentes/educados, bohemios;
5. Alemanes- trabajadores, honestos, inteligentes;
6. Húngaros- patriotas, adaptables/bien orientados, asertivos/decididos;
7. Rusos- patriotas, adaptables/bien orientados, asertivos/decididos;
Los rumanos prefieren a los británicos, americanos y franceses, en segundo lugar a los alemanes y después a los húngaros y rusos.
•Cómo queremos ser (modelo psicológico -cultural ideal)
La diferencia entre cómo somos/ cómo queremos ser” por una parte, y cómo „creemos que somos/como creen otros que somos”, por otra, generan estrés psicológico, estrés que a su vez fortalece los mecanismos de defensa que mantienen las discrepancias. Se entra en un círculo vicioso, que nos mantiene en estado defensivo.
El modelo psicológico -cultural ideal de los rumanos- como queremos ser- está definido en su proyección psicológica: “cómo creo que soy”. La buena noticia es que si los rumanos se creen así como no son, aún así, se creen así cómo podrían ser. Por lo tanto, diría que su proyección – “cómo creemos que somos”- no representa un ilusión positiva, sino un optimismo realista. En el caso de los rumanos existe una oportunidad para desarrollarse y evolucionar en la dirección de un modelo psicológico -cultural ideal.
¿Cómo debería ser este modelo psicológico -cultural ideal? Simplemente, debería crear ciudadanos inteligentes, creativos, adaptables al medio social, con un amplio capital de conocimientos, con personalidad pro-social. Me gustaría ver ciudadanos autónomos/independientes, capaces de ser solidarios socialmente, generosos, como es específico de las sociedades que crean instituciones sociales modernas, mas allá de la comunicad el colectivismo nacido de la inseguridad común de unos ciudadanos inseguros de sí mismos. El desarrollo de estos componentes psicológicos pueden ser parte de un proyecto de país, por el que Rumania no sea solo un país que se ha unido al espacio europeo, si no que este bien integrado en este espacio.
Mi predicción es que haciendo una política educativa, socio-cultural y económica sabia- Rumania será no solo un país adherido a al espacio europeo, si no uno perfectamente integrado en este espacio.
¿Qué quedara del perfil psicológico-cultural actual? Creo que muy poco, porque, en esencia, los rumanos están integrados en la cultura europea, solo que se han estancado en el camino por los bloqueos históricos, el último siendo el periodo comunista. ¿Cómo de rápido se puede hacer esa transición de forma que el perfil psicológico de profundidad se convierta en superficial? Depende de lo rápido que puedan unirse los individuos- ciudadanos autónomos para crear redes sociales que suplanten la influencia de la comunidad colectivista.
Teniendo en cuenta el contexto europeo en el que nos hemos integrado, creo que en máximo una generación (20 años) se hará la transición definitiva, pero la esperanza está en que los cambios puedan ocurrir en determinados segmentos (económico, académico, etc.) lleguen más rápido, para que no tengamos otra generación sacrificada.
Este precisa que „el perfil psicológico de los rumanos es estadísticos, que no puede aplicarse a un individuo, sino utilizado en situaciones donde se quieran llevar a cabo políticas publicas y proyectos relevantes para el país/o para grupos grandes”.
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