La vacuna contra la covid-19, entre dos aguas en Moldavia
Otro frente se divisa en la ya polarizada sociedad moldava. Mientras que el presidente de Moldavia, el prorruso Igor Dodon, se ofrece a ser el primer ciudadano de esta ex república soviética en inocularse la vacuna rusa contra la covid-19, la Agencia Nacional para el Medicamento ha solicitado a Rumania que interceda ante la Unión Europea para adquirir el medicamento Redemsevir y la vacuna anticoronavirus.
En pleno limbo geopolítico entre Moscú y Bruselas, se asoma una nueva confrontación social en este pequeño país de la Europa del Este, incrustado entre Ucrania y Rumanía (miembro de la UE y la OTAN), de tan sólo 3,5 millones de habitantes. El socialista Dodon, que previsiblemente buscará su reelección en las presidenciales del próximo 1 de noviembre, está dispuesto a promocionar el fármaco como una inmunización segura entre sus connacionales, pese a la velocidad de los ensayos y a la poca información sobre su eficacia.
“Estoy listo para ofrecerme como el primer moldavo en probar la vacuna anticovid-19 propuesta por la Federación de Rusia. Quiero hacerlo por los ciudadanos, para que llegue lo antes posible a la República de Moldavia”, escribió el pasado viernes el jefe de Estado en su perfil de la red social de Facebook.
Dodon informó de que estaba realizándose unas pruebas médicas en un centro de salud cerca de Moscú y de que había mantenido conversaciones sobre la vacuna rusa, llamada “Sputnik V” en honor al primer satélite que se lanzó al espacio.
Este lunes, Moldavia notificó 350 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas, lo que asciende la cifra a 33.828 personas contagiadas desde el inicio de la crisis sanitaria.
Ayuda de la UE
El presidente moldavo expresó el pasado 13 de agosto el interés de Moldavia en hacerse con el fármaco, registrado por Rusia, justo el mismo día que el director de la Agencia del Medicamento, Eremei Priseajniuc, solicitó formalmente apoyo a su homólogo rumano, Raed Arafat, para abastecerse de la vacuna anticovid-19 y también del medicamento Remdesevir, aprobado ya por la Unión Europea como tratamiento de la enfermedad y solicitado por Rumanía mediante el Mecanismo de Cooperación de la Comisión Europea.
“Pedimos que (la UE) examine la posibilidad de incluir a Moldavia en esta solicitud para obtener el medicamento Remdesevir, así como la vacuna anticovid-19 para comenzar la inmunización de la población, en concreto de los grupos de mayor riesgo: personal sanitario, personas mayores, enfermos crónicos y niños”, afirmó Priseajniuc, en Bucarest.
Este ruego no tardó en llegar a Bruselas. El europarlamentario rumano Cristian Busoi se dirigió inmediatamente a la comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides, en un escrito en el que le pregunta en qué medida Moldavia puede ser incluida en la petición formulada por Bucarest.
“Quiero asegurar a los ciudadanos moldavos que pueden contar con el apoyo de Rumania y de los europarlamentarios rumanos para obtener el tratamiento contra el nuevo tipo de coronavirus”, subrayó el eurodiputado.
“Nuestro país y la UE han acordado apoyo a los ciudadanos moldavos y a las autoridades en la lucha contra la covid-19, enviando grandes cantidades de medicamentos y material sanitario, incluso desde el comienzo de la crisis generada por la pandemia”, concluyó Busoi.
Moldavia es un país complejo con una sociedad polarizada. Mientras que algunos reclaman un acercamiento a Bruselas e, incluso, una reunificación con Rumania, otros desean estrechar aún más sus lazos con Moscú. La cuestión radica ahora en si la pandemia dividirá más a la población moldava a causa de la encarnizada batalla entre distintos países por hallar la vacuna anticovid-19.