Fiscalía rumana acusa a cuatro antiguos ministros en un caso de corrupción sobre la petrolera Rompetrol
La Fiscalía de Rumanía ha pedido este martes iniciar una imputación contra cuatro antiguos ministros por supuesto fraude en la petrolera Rompetrol, propiedad del grupo kazajo KazMunaysGas. Los cuatro extitulares de Finanzas y Economía Ioan Popescu, Mihai Tanasescu, Sebastian Vladescu y Gheorghe Pogea, que ocuparon esos cargos entre 2003 y 2005, „están acusados de emitir decretos que permitieron a Rompetrol dejar de pagar unas deudas al Estado que ascienden a los 537 millones de euros”, informó la Fiscalía para la lucha contra el crimen organizado rumana, informó la agencia EFE.
A principios de mayo, la Fiscalía había anunciado el embargo de la refinería de Petromidia (en el este del país) y la investigación penal contra 14 personas por evasión fiscal, blanqueo de capitales y fraude.
Las autoridades locales han solicitado que se devuelvan íntegramente las deudas de 2001, mientras que el grupo kazajo aseguró que desconocía de ese fraude.
La petrolera Rompetrol solicitó en junio de 2015 a un tribunal de Bucarest acogerse al régimen de insolvencia, después de que un año antes fuera obligada a ingresar al Estado 50 millones de euros en concepto de impuestos de beneficios que había evadido entre 1999 y 2001.
En octubre de 2014, un exdirectivo de la empresa, un senador, un exministro rumano y un alto cargo del Ministerio de Finanzas fueron condenados por haber participado en una trama de manipulación de la venta de acciones de la compañía que causó al Estado rumano perjuicios millonarios.
En 1998, Rompetrol fue adquirida por el fallecido Dinu Patriciu, que convirtió a la empresa en una multinacional con sede en Holanda y operaciones en decenas de países.
Nueve años más tarde, el magnate se convirtió en el hombre más rico de Rumanía al vender el 75 % de las acciones de Rompetrol al grupo kazajo KazMunayGaz por 1.490 millones de euros.