El mercado del mueble, un negocio rentable en Rumanía

Las exportaciones de mobiliario han ascendido a 8.000 millones de leus en 2014, el doble de los 4.100 millones de leus registrados en 2008, según una estimación de Ziarul Financiar basada en los datos de la Asociación de Fabricantes de Mobiliario de Rumanía (APMR), publica el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), que recoge una noticia del Ziarul Financiar.

El aumento registrado por las exportaciones fue de un 10% en 2014 con respecto a 2013, continuando con la tendencia positiva que se inició en 2008.

Las fábricas rumanas de mobiliario se han beneficiado del contexto europeo favorable, después de que las fabricas asiáticas, reconocidas por sus productos baratos, aumentaron los precios, lo que provocó la reacción de las grandes cadenas de descuento de Europa, que han vuelto a fijarse en los proveedores europeos.

Los fabricantes de mobiliario hace tiempo que decidieron concentrarse en las exportaciones: más del 80% de la producción local va a otros países, siendo Alemania el principal destino del mueble rumano.

En opinión de Dan Sucu, dueño del grupo Mobexpert, el aumento de las exportaciones tiene que ver con los “clientes oportunistas”: se trata de las grandes cadenas de descuento de Europa del Oeste que muestran mucha disponibilidad a la hora de trasladar sus pedidos y que son muy sensibles a las oscilaciones de precios a corto plazo. En este momento, los precios en Asia han aumentado de forma significativa para muchos artículos de mobiliario, sobre todo en los artículos de madera maciza, lo que hace que Europa del Este vuelva a ser competitiva en comparación con Asia. En opinión de Sucu, el fortalecimiento del dólar frente al euro ayuda a esta competitividad que empezó hace tiempo.

Aurica Sereny, presidenta de la Asociación de Fabricantes de Mobiliario, estima que 2014 será más rentable comparado con 2013, pero los crecimientos en los precios de la materia prima y los servicios han influido en los resultados. Sereny también comenta que los fabricantes optan por vender activos, realizar reestructuraciones tecnológicas y recortes de personal para ser más competitivos.