El viceprimer ministro ruso amenaza con volver a Rumanía en un bombardero nuclear
El viceprimer ministro ruso, Dimitri Rogozin, ha afirmado en un tuit que „volvería en un TU-160”, el mayor bombardero ruso capaz de transportar armas nucleares, tras la prohibición de entrada del avión en el que viajaba en el espacio aéreo rumano. El avión en el que viajaba Rogozin, uno de los dirigentes sancionado por la UE y Estados Unidos tras la anexión de Crimea por Rusia, ha sido obligado a dar la vuelta cuando intentaba volver desde Transnistria, región separatista de Moldavia, a Moscú.
Rogozin, que supervisa la industria armamentística rusa, también habría sido interceptado por aviones militares ucranianos a pesar de volar bordeando el territorio de Ucrania, según ha afirmado en sus tuits publicados en inglés.
„Tras la petición de Estados Unidos, Rumanía ha cerrado el espacio aéreo a mi vuelo”, ha tuiteado. „Ucrania, de nuevo, no me permite pasar. La próxima vez volaré a bordo de un TU-160”, ha asegurado.
El ministro de Exteriores rumano, Titus Corlatean, ha pedido a Moscú que aclare si los comentarios de Rogozin representan la „postura oficial de la Federación Rusa respecto a Rumanía como miembro de la UE y de la OTAN”.
„Creo que la amenaza realizada por el viceprimer ministro ruso de usar un bombardero militar estratégico ruso es una declaración muy grave especialmente en el actual contexto regional”, ha declarado Corlatean. „La Federación rusa ha violado la soberanía territorial ucraniana, mientras los separatistas prorrusos están violando el orden público”, ha añadido.
En sus declaraciones ha afirmado que Rumanía ha obedecido las sanciones impuestas por la Unión Europea contra Rusia. Las sanciones que dificultan los viajes están incluidas en el paquete de sanciones que la UE ha impuesto a algunos empresarios y políticos rusos y prorrusos ucranianos, incluyendo a Rogozin.
En otro tuit, enviado una hora antes, el viceprimer ministro ha afirmado que esa misma mañana „se ha reunido con el Comando Conjunto de las Fuerzas Rusas” durante su visita a Transnistria. Rogozin también ha explicado por las redes sociales que su visita a Tiraspol, capital de Transnistria, es con motivo de la conmemoración del aniversario de la victoria soviética sobre la Alemania nazi en 1945.
Este mismo sábado, cazas MiG-29 ucranianos han obligado a aterrizar en Chisinau, la capital de Moldavia, a un avión en el que viajaba una delegación oficial rusa encabezada por el ministro de Cultura, Vladimir Medinski, según ha informado la agencia de noticias oficial rusa, RIA Novosti.
El propio ministro explicó a través de la red social Twitter de que las autoridades de Ucrania no permitieron el paso del avión cuando regresaba desde Chisinau a Moscú y les obligaron a dar media vuelta bajo amenaza de hacerles aterrizar en Ucrania.
La delegación incluía a disputados de la Duma (Cámara Baja del Parlamento ruso) y a representantes del Ministerio de Exteriores y del Gobierno ruso. El diputado Sergei Zhigarev, miembro de la delegación, comunicó que la aeronave no podía abandonar Moldavia.